¿Qué es Raspberry Pi? Es un ordenador de bajo coste y formato compacto, que nació en 2012 fruto de un proyecto de la Raspberry Pi Foundation, que pretendía llevar a todos los centros educativos y universidades británicas un ordenador de muy bajo coste, para universalizar la formación en informática. Tal fue su éxito, que hoy en día la Raspberry Pi ha sobrepasado esos ámbitos y está presente en múltiples proyectos a lo largo del mundo. Basada en arquitectura ARM, con hasta 8GB de RAM y conectividad total, en la actualidad una Raspberry Pi puede ejercer funciones de un servidor informático con un consumo muy bajo y un precio mínimo. El sistema operativo ‘oficial’ es Raspberry PI OS, una versión de Linux Debian especial para este hardware, aunque es posible instalar otros sistemas, incluído, por ejemplo, Windows 10 en una versión IoT Core. Para la instalación del Sistema Operativo, se utiliza una tarjeta SD, alojada en la propia placa. Actualmente es posible adquirir un kit del último modelo, 4B, incluyendo la placa, una fuente de alimentación, tarjeta SD de 32GB, caja y un cable HDMI por menos de 100€. Vamos a lo práctico. Las fotos que vienen a continuación corresponden a un modelo de Raspberry Pi 4B de 4GB de memoria RAM y que lleva funcionando cerca de un año de forma ininterumpida, 24 horas diarias.

Raspberry Pi 4B. Modelo de 4GB de memoria RAM

Con el sistema operativo Raspberry Pi OS instalado, más un servidor de ficheros y un servidor multimedia PLEX, este pequeño servidor trabaja de forma ininterrumpida, ofreciendo además de ficheros standard, contenido multimedia, en concreto fotografía, música y vídeos caseros. Está conectado a la red a través de su interfaz Ethernet a 1Gigabit, y tiene conectado un disco externo a través de USB3.0, donde se aloja el contenido a compartir. Aunque la conexión al mismo se hace en remoto, a través de VNC, se puede conectar un monitor por HDMI, soportando resoluciones de hasta 4K. La placa tiene también conexión para soporte de sonido. El mismo resultado que un servidor standard, a un precio y un consumo mucho menor, y fiabilidad máxima.

Aparte de como servidor, e incluso como pequeño ordenador casero para tareas de navegación o correo, con otros modelo de placas existentes (Pi Zero, Pico) se pueden realizar múltiples proyectos, como temas de domótica, por ejemplo. Pero eso lo vamos a dejar para otro día.